Clases de besos

Beso Aristotélico: Beso realizado a través de técnicas obtenidas únicamente a partir de la especulación teórica, no viciada por cualquier dato experimental, por alguien que siente que estos datos son de cualquier forma irrelevantes.

Beso Hegeliano: Técnica dialéctica en la cual el beso incorpora su propio antibeso, formando una síntesis del beso.

Beso Wittgensteiniano: El hecho más importante sobre ese tipo de beso es que solo se refiere al símbolo.

Nuestra representación mental esta asociada a la experiencia del beso — la cual necesariamente debe ser también diferenciada del acto en sí por razones obvias— y no necesita ser de forma alguna la misma o ni siquiera similar para las diferentes personas que experimentan el beso.

Más que al acto en sí y, como tal, se debe tener cuidado para no hacer generalizaciones no avaladas sobre el propio acto o la experiencia de él basadas meramente en nuestra manipulación de la simbología consecuente.

Beso Gödeliano: Un beso que toma un tiempo extraordinariamente largo, aunque dejándonos incapaces de decidir se fuimos besados o no.

Beso Socrático: Se trata en la verdad de un beso realmente platónico, pero se suele atribuir a la técnica socrática para hacerlo sonar más autoritario. Sin embargo, comparado a los besos más estrictamente platónicos, los besos socráticos son más amplios y presentan mayor cobertura.

Beso Kantiano: Un beso que, huyendo del contacto "fenomenal" inferior, se realiza enteramente en el plano "nominal" superior. Aunque, en la realidad, usted no lo siente por lo que es libre para declararlo el mejor beso que usted ha dado o recibido.

Beso Kafkaniano: Un beso que comienza con la impresión de transformarnos y sin embargo termina por dejarnos locos.

Beso Sartreano: Un beso que nos da una preocupación mortal aunque no tenga la menor importancia.

Beso Pitagórico: Un beso dado por alguien que desarrolló algunas y maravillosas técnicas, pero que rechaza a aplicarlas a alguien para que otros no vengan a las descubrirlas y comiencen a usarlas.

Beso Cartesiano: Un movimiento particularmente bien planeado y coordinado: pienso, luego inmediatamente beso.

Generalmente un beso no es considerado cartesiano al menos que sea aplicado con fuerza bastante para eliminar toda la duda en el que fue besado.

Beso Heisenberguiano: Un beso incierto. Mientras más nos besan, menos se sabe donde fue dado el beso.

Mientras más energía tiene, más difícil es evaluar cuanto tiempo duró. Versiones extremas de este tipo de beso son conocidas como "besos virtuales".

Dado el nivel de incertidumbre tan enorme no se tiene la suficiente certeza si hemos sido besados o no. Los besos virtuales tienen la ventaja, sin embargo, de que no se necesita tener a alguien en persona para compartirlos.

Beso Zenônico: Sus labios se aproximan, llegan cada vez más cerca, sin embargo realmente nunca llegan a encontrarse.